sábado, 8 de agosto de 2009

CORAZONES VIRTUALES.



No se permitía pensar demasiado en nadie, cuando alguien intentaba ingresar tozudamente a su mente, automáticamente pasaba a convertirse en un potencial enemigo, un agresor de su intimidad, privacidad y era desechado.
Alguna historia que otra que mejor no recordar habían ido generando esta impenetrable coraza con una resistencia sobre humana.
Pero como a todos alguna vez nos ha pasado, en esas noches que la luna está alta y brillante, nos detenemos a observar esa bella postal nocturna y la muralla inexpugnable frente a nuestra incredulidad se va descascarando.
Una de esas noches seducida por el espíritu de la soledad Paula vio colapsar todos sus mecanismos de defensa y se encontró desnuda frente a su destino, entregada, sin capacidad de reacción.
Es claro que este cambio tan brusco, esa suerte de revolución no aconteció de la mano de la inmediatez, por el contrario resultó lento y progresivo.
Uno de los más modernos y tecnológicos buscadores de almas solitarias la había cautivado.
Nada más oculto que la soledad de su habitación, nada más íntimo que su micro mundo, ahí donde nadie podía poner un pie porque carecía de invitación.
Con todo el peso de su enorme soledad a cuestas y el ataque incesante de la nostalgia, aquella noche protegida bajo el amparo de la virtualidad informática se hizo propicia para la llegada de una nueva amistad.
En esas noches donde nada importa, solo prima la avidez de un alma triste en busca de compañía, aunque no pase mas allá de compartir una cuántas líneas y con un poco de atrevimiento mutuo hasta alguna imagen animada.
Cuando apoyó la cabeza en la almohada al final de la charla y se dispuso a pasar raya a fin de jornada, concluyó que el afortunado encuentro había sido más que agradable y con las angustias disipadas logró dormirse.
Cuando llegó el lunes y se vio al espejo, la imagen de dama de hierro había vuelto a apoderarse de ella y así los días subsiguientes hasta el próximo encuentro.
Sobrevinieron los días y las charlas, las historias... Entonces Paula descubrió que su pesada y gruesa armadura había sido vulnerada.
Por alguno de los rinconcitos abiertos por el deterioro temporal se había colado como un halo de luz y estaba inserto en ella, lo presentía, la angustiaba, pero la hacía feliz.
Una de esas tardes, mientras esperaba la llegada de su nuevo amigo decidió enterrar los recuerdos, las angustias del pasado. Fue hasta su habitación y se maquilló como nunca, con nuevos colores esperanzadores, esos que no ofrecen los cosméticos.
Lapidó los grises recuerdos que traían hacia ella los fantasmas del pasado y se entregó plenamente.
Se ofreció a ese sentimiento que tanto le había costado aceptar, esa extraña y hermosa sensación que aceleraba su pulso y la cargaba de felicidad cuando llegaba la visita esperada.
Luego de meses de tiempos compartidos y muchos momentos hermosos, inevitablemente llegaba los que los dos imaginaban, iban a confluir en un encuentro.
La etapa virtual se cerraba, para dar comienzo al amor tangible, ese que escribe historias de roces de piel, de húmedos besos cómplices, que te impulsan al abismo de la demencia.
Con la imperiosa necesidad de que el encuentro fuera sorpresivo, único y novedoso, durante todo ese período no se habían mostrado, salvaguardo sus rostros.
Solamente a través de las letras se habían conocido, respetado, encariñado, añorado y amado, de las bocas de los mismos protagonistas se habían desprendido pensamientos como el del verdadero amor.
Las letras, la compañía y el tiempo.
Cargada con una gran locura aderenalínica Paula estaba ya finalizando su viaje de largos tres días de recorrido, distancia que separaba su ciudad con la de su enamorado.
En sus blancas y delicadas manos un papel con nombres de calles, intersecciones y el nombre de un bar.
Faltaban solo un par de calles, el vehículo avanzaba presuroso, mas ella imaginaba que iba en carreta tirada por caballos.
Había explotado en expectación, sus manos se tornaron sudorosas, su corazón palpitaba alocadamente, el final del camino estaba próximo, ya no había vuelta atrás.
Cerró los ojos para imaginarlo, solo quería ver su rostro, la mirada del amor de su vida, aquel hombre que había sido capaz de enamorarla solo con su escritura, con el deslizar de sus dedos por el teclado, regalando y recibiendo caricias desde tan lejos.
Entró al bar, observó hacia la ubicación de la mesa convenida... Estaba vacía.
Imaginó haber llegado antes a su encuentro, se dirigió a la mesa y al sentarse pudo ver a su lado a un hombre.
Un sujeto que poco o nada tenía que ver con la descripción de su amor. Camisa, pantalón y zapatos negros, al igual que un sombrero que reposaba sobre su blanquecina frente.
Que amor descomunal e incontenible habían desarrollado aquellas dos solitarias almas para hacer que la implacable muerte en persona, tomara ubicación en la mesa para excusarse por haber cancelado obligatoriamente el encuentro de los enamorados.

Pablo Fagúndez



4 comentarios:

  1. Asi es... el autor me atrapó solo con el título. Plasmó con palabras tan tangibles, dóciles y pasionales, una realidad que nos envuelve diariamente, aunque su final no solo sorprenda, sino que cautive provocando angustia. El nos ha colocado en una instancia palpable, dentro del relato...y ahí surgen los mas inimaginables sentimientos, una pantalla, un teclado, todo aflora de manera tal que dos personas pueden llegar a sentirse en un espacio de tiempo ilimitado, donde todo se potencia y , quien sabe que final tendrán. El autor le dió el suyo.

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  2. NOOO… por queeé??? Empecé llorando y terminé peor… las cosas no tienen porque ser así!!! …quiero quedarme con la ilusión en la mente q puede existir otro final…

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  3. Pablo: el final no es para mi, yo quisiera conocer algún día a mi amigo.
    La historia es hermosa, como todos tus escritos, te felicito una vez mas!!!
    ANDREA ENCINA

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  4. TU RELATO UNA VEZ MAS ME HIZO CAER LAGRIMITAS DE EMOCION, VIVI ESAS SENSACIONES Q DESCRIBIS EN PAULA , LEERLAS ME HIZO RECORDAR MUCHASS COSAS HERMOSAS , SOLO Q GRACIAS A DIOS EL FINAL NO FUE IGUAL , TE FELICITO HACES SENTIR CADA COSA Q ESCRIBIS , LOGRASTE ATRAPARME CON TU ESCRITURA , DE SOLO LEERTE ME TRASLADAS A CADA UNA DE TUS HISTORIA , COSA Q POCAS VECES LOGRE AL LEER ¡¡¡TE FELICITO !!!
    GABY

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